La Asociación Bancaria (AB) ratificó que su reclamo por descuentos salariales en virtud del impuesto a las Ganancias continuarán hasta que haya una respuesta satisfactoria del Gobierno. Ese gremio sostiene que el 65% de los más de 100 mil trabajadores de todo el país, pagan el “impuesto al sueldo”. “Cuando hacen horas extras o perciben alguna gratificación llegan al 100% los empleados que tributan a la Afip” aclaró el titular de la AB, Sergio Palazzo, a Bae Negocios.
El dirigente, de extracción radical, resaltó que este punto será el eje de la próxima discusión de paritarias que tendrán en marzo. Semanas atrás, logró pactar con las cámaras bancarias el pago de sumas puente de $2.200 entre enero y marzo, y un bono de $ 3000 como anticipo de esa negociación tripartita. La AB es uno de los sindicatos con “luz verde” para incluir en la negociación tripartita un tópico de alto impacto para los empresarios: la participación en Ganancias, como los mineros, siderúrgicos, juego y petroleros.
Bancarios nuclea hoy a 103.500 trabajadores en el país, con un sueldo promedio de $21.000. Entre quienes respaldan la gestión actual, por fuera de los juegos de poder sindicales, destacan que esta gestión “recategorizó” al empleado bancario durante los últimos años, en paralelo a la “tecnificación” de los servicios en las casas centrales y filiales de todas las entidades financieras.
Sin alineamiento en central obrera alguna (se alejó de la CGT Azopardo en 2012), los Bancarios tienen fluido contacto con el Ejecutivo Nacional y Palazzo está considerado como uno de los posibles candidatos a liderar una CGT unificada, al igual que Juan Schmid (Dragado).
Algunos de sus pares consideran que “defendió y defiende el modelo sindical tradicional, mejor aún que muchos peronistas” y elogian “la dinámica de equipo que instaló en una organización bajo intensa crisis”. Refieren a 2009, cuando fue detenido el ex secretario general Juan José Zanola y Palazzo asumió la AB siendo adjunto, hasta 2014 ocasión en que gana las elecciones de octubre pasado, obtuvo el 87,9% de los votos, participando en tres listas.
En 2009 la AB tenía $1.068.000.000 de pasivo y 15 meses más tarde aseguran que bajaron esa suma a $500 millones. El gremio decidió un doble mecanismo de auditoria para fiscalizar sus números, por un lado la Universidad de Buenos Aires a través de la Facultad de Ciencias Económicas, al mismo tiempo con la firma Ernst & Young.
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